Yo quiero darte un canto de esperanza
que cure un poco tu dolor y pena
ante esta oscuridad, que nos envuelve.
En la noche callada de este mundo
vamos unidos del sentir incierto
y separados por gentil amor.
El miedo se supera con amor
y fe que alienta siempre la esperanza,
ante las puertas de un mañana incierto.
Luchemos, porque aún vale la pena,
por este hospitalario y noble mundo
que con su amante capa nos envuelve.
No sigas el consejo del que envuelve,
en un desasosiego sin amor,
sus cuitas y las lanza por el mundo,
quien brega entre la duda y la esperanza
será siempre la sombra de una pena,
sin remitente y con destino incierto
Sé firme y sé camino ante lo incierto,
aleja el pesimismo que te envuelve.
Si a alguien no le gusta, pues ¡qué pena!
espinas tiene el tallo del amor
para que dé la flor de la esperanza,
y cubra con su paz a todo el mundo
Prosigue sin dudar pues hay un mundo
de razones. Verás que el sol incierto
saldrá algún día a darle a la esperanza
la suave calidez con que se envuelve,
los rayos que derrame con amor
harán que superemos cualquier pena.
Luchemos por que el hoy vale la pena.
¡que llegue este mensaje a todo el mundo!
abramos las ventanas al amor
para cerrar la puerta al miedo incierto;
si al fin ese mañana nos envuelve
será un día plagado de esperanza.
La esperanza, que cubre nuestra pena,
envuelve los dolores de este mundo
y apaga un miedo incierto con amor.
- Javier
Todos los poemas aquí mostrados son de mi autoría a menos que se indique lo contrario.
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